El Urbanito

Crónicas de lo que sucede alrededor nuestro y eventualmente de lo que sucede en mi interior.

Fashion for one night

Published lunes, junio 26, 2006 by schatz67 | E-mail this post

Quienes me conocen un poco saben que uno de los aspectos que más critico en el "limeñismo" es la noveleria de ver y ser visto en sitios y "points" de moda.Si voy a un restaurante "ficho" (cuando el presupuesto me lo permite) es porque voy a comer algo que además de no ser preparado en mi casa tiene algun tipo de ingrediente o preparación especial que lo hacen extraordinario, por ejemplo, el Restaurant Matsuei, comida japonesa de primera que uno lógicamente no puede comer todos los días pero que merece una visita de cuando en vez.

Para comer algo que puedo mandar a preparar en mi casa o que solo tiene como único valor agregado el que te vas a encontrar con la GCU prefiero quedarme tranquilo sin gastar gasolina o investigar-sin hacer mella en mi presupuesto y en mi sentido común-alguno de los incontables "huariques" que se encuentran desperdigados por toda la ciudad.Con N tenemos una suerte de preferencias y locales escogidos adonde vamos despues de ver una película,cuando tenemos mucha hambre o demasiada flojera para cocinar.Asi como uno tiene un médico,abogado o consejero de confianza nosotros tenemos nuestra sanguchería favorita, el chifa preferido,la pizzeria estrella o nuestros incomparables anticuchos.Gustos mayores, contados con los dedos de la mano.Huariques? Al mediodía,con tiempo y tranquilidad.

Excepciones más o menos,seguimos este esquema hace varios años y la verdad que no nos quejamos.De cuando en vez tenemos alguna invitación a comer y asi sucedió hace unos diez días.Una amiga de N, compañera de clase -amiga de toda la vida y comadre para mayores señas- y a quien por motivos de trabajo y viajes vemos solo una vez al mes nos llamó para proponernos salir a comer a un nuevo "point" que parece le había sido recomendado por un hermano de ella.Que es un local nuevo, que todo el mundo se pelea por entrar allí, que la comida es buenísima, que de entrada te dan la hostia del Papa, en fin, una serie de razones y argumentos que convencieron a N y a los que no me podía negar, total, es muy buena amiga de nosotros y en las ultimas semanas no habíamos salido mucho con N. Encima tanta recomendación me creaba intriga, al fin y al cabo , Lima debe ser uno de esos lugares en donde se abren y cierran varios restaurantes semanalmente al dictado del éxito en la sazón o el marketing y la noveleria.

Nos encontramos previamente en la casa de nuestra amiga,en Barranco.Algunos bocaditos, un par de scotch´s y enrumbamos hacia el punto en cuestión luego de confirmar telefónicamente la reserva y nuestra asistencia ("porque sino mejor ni vayas, el lugar para a full").Encima no sabía donde quedaba y estabamos yendo en el carro de nuestra amiga por lo que la curiosidad se tornó en impaciencia. Cual sería la sorpresa al enrumbar hacia la Bajada de Armendáriz y confirmar mis sospechas:Nos estabamos dirigiendo a CALA, aquel restaurante "fashion" que se ha levantado sobre la Playa Barranquito.Demasiado tarde para protestar,eramos además tres parejas, todos los demás parecían contentos con la excursión asi que decidí poner mi mejor cara,buen talante y seguirle la cuerda a los demás,no me gusta eso de andar de tumbafiestas y menos los Viernes por la noche.Como podrán deducir,el sitio estaba atiborrado de gente y autos, terminamos parqueando en la playa del costado,pagando 5 soles por cuadrarnos al lado de las parejas asmáticas.

El sitio esta dividido en dos ambientes: El 1er piso es un lounge (que ya describiremos despues)y en el 2do piso el restaurante que es regentado por Alfredo Aramburú.Un estilo minimalista en la decoración, literalmente atestado de gente,una terraza que da exactamente a la playa (es alucinante como se han zurrado en la ley , han ocupado TODO el espacio de la playa)y el inconfundible tufillo a lugar de moda en donde puedes servir un huevo frito con arroz y la gente ni se va a dar cuenta pues esta más ocupada en mirarse que en disfrutar de la comida como celebración per se.

El restaurante no es caro,tampoco barato.La carta es bastante variada, con la lógica predominancia de pescados y mariscos. Yo me pedí un tartare de atún y un risotto con camarones.Los otros comensales se inclinaron por los pescados en mescolanzas orientales, el atún en sillao y jengibre -del que alcanzé a probar un poco- estaba bastante bueno. Mi tartare tenía una mezcla de sabores un poco ortodoxa en donde el sabor a albahaca no se complementaba sino más bien invadia los predios del pescado.El risotto estaba cumplidor y servido en una porción generosa pero se sentía la invasión de algunos langostinos en un lugar en donde el coral y el camarón deben imperar, digamos que no estaba como para tirar manteca al techo ni dar tres hurras por el cheff.

No es un lugar cálido ni acogedor,es más bien demasiado ruidoso y caótico para mi gusto que es más bien intimista y reservado,como pienso que debe ser el ambiente propicio para disfrutar adecuadamente de una comida.Demasiada gente,altisonantes voces,tal parece que el urgente reclamo de ser reconocido como parte integrante de la fiesta era unánime. La cuenta salió a 150 soles por pareja, teniendo en consideración que habiamos llevado el vino por nuestra cuenta. Alguien,luego de cancelada la cuenta decidió que era una buena idea bajar al lounge mientras yo pensaba en que con esos 150 soles me alcanzaba para 10 tallarines saltados con calamar y cojinova en "Los Calamares", 20 porciones de menestrón en "Café Tostado", 10 cebiches XL de conchas negras en "Carlos y Gladys",20 porciones de anticuchos en donde la Sra. Arita,incontables platos de caucau y huevera frita en el Bar Queirolo y tres fuentes de sancochado (de donde comen tranquilamente 6 personas)en el restaurante "El Norteño" de la Av. México.Comprobado, una vez más, que para comer bien no se necesita tener plata en este país,solo hay que tener un poco de ánimo explorador y liberarse de algunos prejuicios e ideas preconcebidas sobre lugares y apariencias.

Bajamos al lounge, en el cual se encuentra ubicado un bar en forma de rectángulo que domina toda el área y que esta complementada con bancos y sillones de diversas formas y una terraza angosta con poca gracia. El lugar estaba repleto y casi todos los presentes vestian camisa a rayas,bluejean medio roto o fashion,cabello con laca peinado con crestita al medio y una suerte de rictus corporal que los hacia mover la cabeza asincopadamente de un lado para otro al ritmo de la música electrónica que en forma monótona e ininterrumpida se propalaba desde un promontorio cercano al bar.La gente no bailaba,conversaba a los gritos o simplemente cumplía con mirarse en forma escrutadora y se preocupaban más bien en ocupar un sitio preferencial que permitiese su exposición contínua y fotogénica.

No dure más de 15 minutos en ese antro consagrado al aluminio y al polyester.No sé si será la edad, que ya me ha hecho perder un poco la capacidad de asombro antes "novedades" como esta.O será quizás otra comprobación más contundente: Que para salir a divertirse y estar "in" no solo hay que disponer de dinero y buen ropero: también hay que poner cara de huevón.

23 Responses to “Fashion for one night”

Isabel Barceló Chico on junio 26, 2006 4:53 p.m.

Coincido en tu apreciación de los lugares de moda, lo que cuentas ocurre en todas partes del mundo occidental. La música preciosa. Saludos cordiales.
Rolando Escaró on junio 26, 2006 5:49 p.m.

yo creo que sobre todo impera el poner la cara de huevón, después de todo, es parte del look que impone el lugar...
Anónimo on junio 26, 2006 7:55 p.m.

por favor...donde queda carlos y gladys??? me encanta el cebiche de conchas negras igual que a mi esposo pero no conocemos ningun lugar lo suficientemente digno...por favoorrr la direccion...siiiiiiiii?????
Ursula on junio 26, 2006 8:16 p.m.

Por lo que parece es el típico lugar que se pone de moda por unos meses y luego queda relegado al olvido cuando aparezca otro sitio igual de "fashion", puaj... me llega la gente posera...
Saludos!
.: MeLi :. on junio 26, 2006 9:55 p.m.

A ver, voy a ser sincera (a veces me da miedo hablar porque me tildan de miserable o de pobretona, pero a mi no me regalan la plata):

Con 150 soles hago una comilona tipo bautizo para toooooooda mi familia, y eso que somos bastantes.

Leer este tipo de post ilustrativos me super encanta, querido Schatz. Pagar esa cuenta por algo ni tan extraordinario me hace querer más mi pobreza.

Continúa visitando, que yo continuaré leyendo.

Besos.
Anónimo on junio 26, 2006 10:14 p.m.

En verano estuve vacacionando en Lima y me invitaron a comer en un restaurant de la playa Punta Negra.
Nos atendieron a cuerpo de rey y comimos delicioso. El lugar creo que se llama El Pez Dorado. Lo recomiendo.
Un lugar agradable y muy económico.
En Lima siempre se come riquisimo.
Maria Eugenia
x1 on junio 27, 2006 12:16 a.m.

Schatz, bueno a mi la verdad ese sitio en particular ME LLEGA! y me llega xq nos e ve la playa. Acaso han visto otro país donde desde la pista no se pueda ver la playa? es deicr normalmente las construcciones están del otro lado para que las personas puedan disfrutar de la playa justamente.

Conozco varios sitios donde se puede disfrutar el momento en grupo. Y no es necesario gastar tanto dinero ni preocuparse del look "fashion".

En fin, cada uno con su tema. Pero si voy a comer Yo mil veces un lugar con música suave (o sin música) y conversar.
Giancarlo on junio 27, 2006 12:25 a.m.

¡Ja! La clásica novelería de los points de moda. No diré que nunca caí en ellos (quien esté libre de pecado que tire la primera piedra), pero mi modus operandi solía ser el esperar por lo menos un año para ver si el susodicho point superaba la prueba del tiempo. Si era así, y si me interesaba lo que ofrecían, recién entonces me dejaba caer por allí.

Pero siempre preferí mis huariques, y aquí unos cuantos para quien quiera probarlos (Schatz, deberías hacer una compilación de huariques con categorías):

El Tío Darío. Una cevichería manejada por uno de los dueños (o ex dueños, no lo sé) del Matsuei. Exquisito punto para probar platos interesantes como el calamar relleno (pídanlo con tiempo, su preparación toma 45 minutos), el tacu tacu Darío's, el tiradito Darío's con alcaparras, y otros más. Búsquenlo en las Torres de Limatambo, en los edificios que dan a la av. Primavera, casi casi al lado del Primavera Park Plaza.

El Punto Azul. Bueno, bonito y barato. Los arroces con mariscos solían ser espectaculares. Sólo he ido a dos: el que está frente a la municipalidad de San Borja, y el que está en el óvalo de la av. Primavera, frente a Los Alamos, pero me dicen que el mejor es el de la av. Petit Thouars, cerca al cruce con Javier Prado.

Ésta cevichería no tiene nombre, pero está en La Victoria, en una calle perpendicular a la av. Canadá, a diez metros de ella, frente al mercado Palermo. El dueño y cocinero es un japonés al que sólo le dices si quieres un ceviche, tiradito o saltado, y él te lo preparará como se le ocurra. ¡Y nunca hay pierde! Lo reconocerán por ser una casa verde, con varios autos en la puerta y un guachimán de lentes oscuros cuidándolos. Si necesitan más referencias, vengan desde el Óvalo Palermo hacia la av. Canadá, giren a la izquierda, y entren en la primera calle a la derecha. El restaurante (sólo seis o siete mesas a puerta cerrada) será la primera casa a mano derecha.

Y ya que están en La Victoria, no se pierdan los sánguches del Palermo, en su ubicación original (en el mismo Ovalo Palermo). ¡Ah, mi reino por un sánguche de lomo con su cebollita más!

El Tato's. No hay mejor excusa para tomar el auto un fin de semana y manejar hasta Barranca (sí, Barranca), que probar uno de los extraordinarios Tacu-tato's. Si no lo conocen, sólo pregunten por él en el malecón de Barranca, frente a la playa. El viajecito de tres horas (km. 175 de la Panamericana Norte) vale completamente cada sol invertido en gasolina.

¡Hey! Parece que lo que más me ha venido a la memoria son los huariques cevicheros. Será por el calor que está haciendo en Japón estos días... Ah, cómo extraño un buen ceviche limeño... Disfruten la comida peruana, es realmente extraordinaria.
schatz67 on junio 27, 2006 1:06 a.m.

Isabel,
Como tu dices, pasa hasta en las mejores familias y es moneda corriente aquí y allá.

Digler,
Bueno,yo salí del lugar y seguía con cara de huevón.Lo peor es que parece que me dura hasta hoy.

Patty,
Carlos y Gladys es la mejor cebichería de conchas negras de Lima,el Viernes voy a postear sobre ellos.Si tu vienes desde Barranco hacia Chorrillos por la Av.Huaylas,deberás parar una cuadra antes de la cárcel de mujeres.En ese semáforo se intersectan la Av.Huaylas y la calle Terán.Te metes una cuadra a la izquierda y en la esquina con una callecita esta la cebicheria.Te recomiendo ir temprano,a la 1:30 esta repleta.Hay de conchas negras solo,mezclado con pulpo y el triple que lleva almeja,los precios son para el chico 8 soles y para el grande 15 soles.
El sitio es un huarique pero el cebiche es IMPECABLE.Provecho.

Ursula,como tu bien dices,es un sitio para todos los poseros de Lima,ni más vuelvo a pisarlo,así me invite Scarlett Johansson.

Meli,completamente de acuerdo contigo cari,la primera reflexión por eso fue cuantas cosas podía hacer con esa cantidad de dinero.Y no tiene nada de malo decir las cosas como son ni tiene nada de malo comerse a veces las uñas.Nunca he aprendido más que en mis épocas de vacas flacas.

Primicia calientita chocherita,todos los viernes voy a postear sobre algun huarique limeño o sobre la historia de algun platillo,asi que si conoces de alguno que esta cerca de tí,pásame la voz,voy a refrendar mi idea que uno en Lima puede ser feliz con una china(y con una zamba también pue familia).

Maria Eugenia,
Por fin los peruanos estamos aprendiendo a reconocer en nuestra diversidad y riquísima variedad de expresiones (culturales y gastronómicas)a las herramientas que nos pueden ayudar a mejorar no solamente nuestra percepción del país sino también nuestra interrelación ciudadana.Nuestra comida es mestiza,como el país y me alegra mucho saber que te encantó.

Cloud,coincido contigo al 150%,lamentablemente,a veces los compromisos te obligan a transigir en cosas como esta ,felizmente existen los blogs,en donde les puedo sacar la mugre a los tarados que tratan de imponernos la agenda de mil y un formas.

Giancarlo,

Dos coincidencias y una discrepancia.Empecemos por las felices coincidencias.

El Tío Darío(que antes estaba en Limatambo y ahora esta a la espalda del Teato Marsano,sobre la misma Av.Petit Thouars) es el non plus ultra del tiradito y de los saltados orientales con su touch criollo.La verdad,es la cocina que amalgama perfectamente la pulcritud oriental con la riqueza criolla de sabores,en la misma tradición de Rosita Yimura,Sato y Javier Wong.

El Tato´s es un deber para todos los que pasan por Barranca.Sin lugar a dudas es uno de los mejores tacu-tacu de mariscos del perú,bastante competitivo con el que hace otro restaurant nisei que debes conocer:"El encuentro de Otani",en Chorrillos.

En donde si no coincidimos es en Punto Azul.Es muy popular en estos momentos pues sus platos calientes los sirven en bacinica,taypa,como le gusta a la mayoría de la gente.

Les envio un abrazo a todos.
Giancarlo on junio 27, 2006 2:00 a.m.

¡Hey! ¿Me mudaron al tío Darío? Bueno pues, habrá que buscarlo en su nuevo local a mi regreso. Y el encuentro de Otani, ¡cómo olvidarlo!

¡Jajaja! Qué mala opinión tienes del Punto Azul. Bueno, yo no voy por allí hace casi tres años y, si bien nunca fue haute cuisine, nunca esperé escuchar en ese tiempo tan mala opinión del lugar. Lástima.

Y ahora que me acuerdo (es hora de almuerzo en Japón), otros dos "huariques" (ni tanto) de comida china, el Chifa Jade (al lado del local principal de los masones, en el óvalo Quiñones de San Borja) y el Chifa del Club Real (al lado del Country Club). Ambos tienen (tenían) buffets diarios de 20 soles de buena calidad. Imprescindibles para las escapadas a la hora del almuerzo en días de semana.

¡Ah! Y por supuesto el restaurante-escuela de Le Cordon Bleu, en Miraflores. Verdaderas exquisiteces a 30 soles por persona, preparadas por alumnos de último año.

Listo, ya anoté en mi agenda revisar los tours coulinarios de Schatz todos los viernes. ¡Provecho!
schatz67 on junio 27, 2006 7:28 a.m.

Giancarlo,

En la semi-somnolencia con la que estaba cerrando mi ultimo comentario me olvidé de dar con la cebicheria que mencionas que curiosamente...la menciono yo también en mi respuesta.

La cevicheria del japonesito es la mismísima de Javier Wong.El antes trabajaba en Balconcillo,a la vuelta del grifo ubicado en el Puente México.Un lunático a carta cabal, te atiende de acuerdo a lo que ha conseguido en el mercado y en relación al humor con el que se ha levantado.Si hay mero, no necesariamente te lo va a preparar en cebiche, a el se le puede ocurrir que un sudado oriental es mucho mejor y que ese día"le va a salir mejor" y juá, te lo prepara en dos patadas.

De cualquier forma es bueno y merece ser visitado más de una vez.Curiosamente, esa zona de Santa Catalina es pródiga en reductos peruano-nipones de muy buena sazón."Donde Alfredo",ubicado cerca del restaurant "Huanchaco", es propiedad de un tipo que empezó con una carretilla y hoy hace, según mi opinión,el mejor cebiche del Perú,título pretensioso por demás pero adecuado de acuerdo a mi trajinado paladar.Curiosamente,su carta esta basada en especialidades de pescados y mariscos cocinados a la modalidad oriental.

Y el otro sitio esta ubicado a la espalda de la 1era cuadra de la Av. Canadá, en Balconcillo."Los Calamares" es administrado por una venerable señora japonesita (y un cocinero nisei adentro)que se sienta todos los días de 11 a 5 de la tarde y tiene como especialidad el cebiche con su toque de naranja agria y los tallarines saltados con calamar y pescado frito.Una verdadera sinfonia mi estimado Giancarlo.

Un abrazo

Schatz
Martín Palma Melena on junio 27, 2006 8:29 a.m.

Hola Schatz

Yo soy como tú, también me gustan los lugares intimistas y de buena sazón, donde lo que importa es pasarla bien con la familia… Con buen gusto para comer y con la cantidad de oferta culinaria que existe no es necesario maltratar el presupuesto. Quizás por eso muchos lugares de moda duran lo que un suspiro y, en cambio, los que duran toda la vida son esos restaurantes poco publicitados, pero más conocidos porque todos se van pasando la voz. Interesante crónica…

Saludos
Alfredo on junio 27, 2006 9:00 a.m.

ta madre llegue tarde al comentario

no se porque me jode tanto ser de los ultimos

es que hace tiempo no veia mis feeds en el google reader

yo tengo 26 y pienso EXACTAMENTE IGUAL...carajo que 150 soles me hubieran dolido

Es un banquete para 4 en el Edo Sushi Bar...y como tu,yo tambien puedo dar una lista largasa de todas las super comidas con 150 soles

porque la gente es asi?
Laura Martillo on junio 27, 2006 11:35 a.m.

Interesante experiencia por el mundob fashion de la comioda, en donde te vas con las mismas.

Algunoi de los párrafos me pareció el inicio ideal para una novela corta. Por un momento olvidé que estaba ante un post.

Saludos.
El Chepis on junio 28, 2006 12:46 p.m.

Pues yo sí me llevo la corona de los tardones. En realidad coincido con la mayoría de los comentarios que me preceden. Amo comer, amo más aún comer bien, y para hacerlo, tengo que sentirme cómodo.

Hace poco menos de un mes fui con un amigo a "Pescados Capitales", y si bien me interesó bastante, la atención dejó muchísimo que desear, la comida llegó tardísimo... con decir que fuimos a las 12:30 y almorzamos a las 3:30. Encima, me moría de frío, y la combinación de música con gritos es fatal. Si le agregan el hecho de que estaba muerto de hambre, entonces es bastante natural que haya terminado con un dolor de cabeza infernal.

Como comprenderán, tras todo ésto, pagar una cuentaza no es muy agradable.

Y Schatz, créeme, no es la edad. Si bien me gusta ir a algún point de vez en cuando, definitivamente no me gusta cuando se trata de comer.

Un lugarcito que no es ni caro ni barato, pero que me gusta mucho es el "Siam", en Caminos del Inca, más o menos la cuadra 5 si no me equivoco. Tiene sólo 9 mesas, el ambiente es muy tranquilo y la comida cumple.

Finalmente, disculpa mi ignorancia, pero qué significa GCU?
El Chepis on junio 28, 2006 12:48 p.m.

Oh... me acabo de acordar. Tips para poner una cara de huevón convincente: Pronuncia muy aburridamente la palabra "Putaaa", y mantén la expresión que adquiere tu rostro cuando finalizas la palabra. :P
AugusBlog on junio 28, 2006 1:53 p.m.

Voy a ser franco, a mi me gustan mucho los sitios "in" o los "points" de moda y creo que es una costumbre que adquirí hace mucho tiempo, y que ahora que vivo en Chile, aún conservo.

Esto no implica que uno no vaya a sus "huariques". Miles de veces, después de salir de los "points" de moda me gusta darme una vuelta por la Carcochita de Lince a comerme un rico Taco, o una hamburguesa donde la Tía Veneno en Barranco (que pena que na no esté).
La proxima vez que vaya a Lima, voy a ir a CALA...buen dato Schatz.

Finalmente, si uno tiene una buena posición económica y puede darse el gusto de ir con sus amigos o familia a un sitio "in", ¿Porque no hacerlo?.
schatz67 on junio 28, 2006 2:45 p.m.

Hola Martin,
Me imagino que tu como buen amante de la literatura debes haber escuchado(no sé si llegaste a conocerlo) del famoso "Wony´s",ubicado en el centro de Lima y punto de referencia obligado de literatos y bohemios de la generación del 50.Era propiedad de unos japonesitos que hacian un lomo saltado ESPECTACULAR.Un día cerró,parece que la familia se dedico a otra cosa.Creo que la relación entre huariques y literatura es materia para más de un sabroso post.

Alfredo,a todos nos duele desembolsar esa cantidad de plata, es el mal llamado precio de la fama,ja,ja,ja,ja.

Gracias por la visita Laura,en el mundo fashion de pasadita nomás,como dijo periquito,mequitoymeborrorapidito.

Isa, la huachafería limeña tiene manifestaciones más alucinantes que la de concurrir a un restaurant de moda.Una crónica de el reglamento de una playa privada de "eisha" haría las delicias de un sociólogo (o de un psiquiatra).
Por otro lado ya no estoy tan redondito,digamos que no es muy fashion lucir como un toro cebú,ja,ja,ja,ja.

Habla Chepis,ya había escuchado algun comentario similar sobre Pescados Capitales.Parece que se preocupan de hacer entrar la mayor cantidad posible de gente y han descuidado mucho la atencion y la calidad del servicio.Que dificil es a veces comerse un buen cebiche no? Cuando estes por la zona andate a "La Red",que esta sobre la misma Av.La Mar,su cebiche esta muy bueno y el tacu tacu relleno con mariscos es como una noche con Monica Bellucci:Inolvidable.

GCU es un termino acuñado por la China Tudela(que mucha gente cree que es de carne y hueso) y significa:Gente Como Uno,es decir, gente "bien",de buena pinta,con residencia en un distrito bonito y asidua concurrente a sitios en donde todos se reconocen como pares y similares,nada de "marrones" ni mezcolanzas raras por favor.Mejor paro porque sino arrojo sobre el teclado.Gracias por el tip , creo que también se puede practicar con "Xuxa",ja,ja,ja.

Augusto,grato recibir tu visita.Entiendo tu punto de vista.De una u otra forma,creo que el sentido de la reflexión del post inicial y de los comentarios sucedáneos es que las caracteristicas de un local o el tipo de gente que lo frecuenta no deben ser excusa para arrimarnos una cuenta gruesa que a veces no se condice con la calidad del servicio que hemos recibido.

Me haz hecho reir haciendome acordar a la tía Veneno.Cuando vengas por Lima pasa la voz para recorrer un par de huariques que como en el comercial, estoy seguro que "te encantalán!!!"

Un abrazo a todos

Schatz
El Chepis on junio 29, 2006 4:03 p.m.

Claro! La china Tudela... cómo no me acordé? Jajajaja. Lo peor de todo es que conozco a las verdaderas "Tudela"... sólo compadezco a su viejo, el pobre ministro tiene el infierno en casa. :S
Martín Palma Melena on junio 30, 2006 9:30 p.m.

Hola, Schatz

Se ve que estás mejor informado que yo sobre la bohemia de antaño. En el Centro de Lima sabía del mítico Palace Concert, frecuentado por Abraham Valdelomar y después convertido en una discoteca de cuarta, según entiendo (aunque ya me retrotraje demasiado en el tiempo). Pero ya me dejaste la curiosidad y averiguaré sobre el “Wony´s”. Quizás en la Red pueda hallarse alguna crónica sobre la importancia de este local como punto de encuentro de los intelectuales de los cincuenta…

Ahora, volviendo al siglo XXI, hay un local en la avenida La Marina llamado Kio´s, donde venden los mejores panes con chicharrón, y eso que no soy muy inclinado a los chicharrones, aunque la misma recomendación ya la hice en el blog de Mónica

Un abrazo
schatz67 on julio 01, 2006 12:27 p.m.

"El Perú es Lima,Lima es el Jirón de la Unión,El Jirón de la Unión es el Palais Concert y el Palais Concert soy yo".

Conocida e inmortal frase acuñada por Abraham Valdelomar y que definía no solamente su insufrible vanidad (solo superada acaso por la de J.S.Chocano)sino un centralismo asfixiante que no es de reciente data.

La bohemia del 50 siempre me causo curiosidad.Que no daría por sentarme en el Bar Zela a ver a Sérvulo dibujando bocetos,tomarme un capitán en el Negro Negro con A. Bryce,invitarle una copa de champagne a un par de bataclanas en el Embassy o escuchar a Martin Adán en el Cordano gritar luego de escuchar la noticia del golpe de Odría: "Señores,el país ha vuelto a la normalidad".

El Kio´s es una garantía en todo lo que es chicharrones y relleno.Antes no me gustaba mucho el hecho que no le agregaran cebolla al chicharrón pero la calidad de los sandwiches ofrecidos es tal que uno los llega a disfrutar en forma diferente a la acostumbrada.

El Wony´s y el Palermo eran referencia obligada para las generaciones del 60 y del 70.Me imagino que más de algun escritor vinculado a esas épocas te sabrá dar alguna referencia sabrosa sobre personajes,sucesos y anécdotas ocurridas en ambos sitios.

Un abrazo

Schatz
Unknown on julio 01, 2006 8:30 p.m.

Todo está en el costo beneficio. Vas a Mangos de Larcomar, te pides un plato medio caro/medio malo, pero ahi no pagas solo por el plato, sino por el ligero sol de invierno que te cae mientras te sientas en la terraza.

Si no descubro ese costo beneficio del sitio del que hablas, probablemente nunca vaya, así como nunca fui a ningún sitio, porque a veces realmente prefiero mi arroz con huevo frito.

Odio la frivolidad limeña aunque sé que soy parte de ella.
.: MeLi :. on julio 03, 2006 1:53 p.m.

Qué bien cari, así que postearás cada viernes a las 12 después de la misa una nueva crónica gastronómica... ¡Sweet!

Estoy ansiosa por la próxima entrega. Gracias por el dato de "Carlos y Gladys", les caeré este domingo, previa visita a la cárcel de mujeres, claro está...

Besos.